La política de las emociones – Toni Aira

“La obsesión por tejer relatos – en las mentes del público–, para imponerlos como guion a menudo vacío, se ha comido la concepción más clásica de la política, que es la acción ligada a construir realidades – palpables, sobre el terreno–.”

En “La política de las emociones” el doctor en comunicación y profesor universitario Tony Aira, realiza un estudio sobre las emociones que mejor describen a diez dirigentes del mundo político. A través de 10 capítulos, en donde aborda una emoción diferente asociada al liderazgo o la manera de actuar de cada personaje, Aira desarrolla a fondo el por qué se asocia a dicha persona con esa emoción, demostrando a través de sus acciones, el grupo de personas que lo rodea, sus decisiones en tiempos de pandemia y los resultados de su gestión el por qué se puede considerar que esa emoción predomina en la comunicación política de ese líder.

El libro aborda 10 emociones, que son: El odio, representado por Donald Trump; El optimismo, personificado en Boris Johnson; la indignación, asociada a Ada Colau; El amor, asociado a Justin Trudeau; la Impaciencia, relacionada con Carles Puigdemont; la euforia, personificada en Pablo Iglesias; La venganza, representada en Vladimir Putin; La satisfacción, personificada en Pedro Sánchez; el enfado, relacionado con Santiago Abascal y la admiración, asociada a Ángela Merkel.

El libro mezcla personajes de la política mundial, con personajes de la política española, algunos más conocidos que otros, pero cada capítulo está bien ambientado en el contexto político y social de cada personaje, que no es necesario ser un español o un conocedor de primer mano de su vida política para entender lo que se dice. Igualmente, cada capítulo cuenta con bases teóricas de diferentes autores, que son utilizadas para explicar mejor cada emoción asociada al personaje. Adicionalmente, los capítulos tienen un análisis sobre el desempeño de cada individuo frente al Covid y cómo desde su cargo y responsabilidad, reflejó esa emoción que lo caracteriza.

En cuanto a los capítulos, el de Donald Trump y el de Putin me llamaron mucho la atención, pues en cada uno se detalla de una manera muy real las narrativas que hay detrás de cada estilo, sus asesores y la manera en que ambos buscan generar esas emociones a las que son asociados desde sus gobiernos, cada que aparecen en público y con cada decisión que toman.

De igual manera, el capítulo dedicado a Ángela Merkel es muy interesante, pues es la mujer que más tiempo llevaba en el poder y que había tenido más protagonismo mundial en hechos trascendentales como la crisis del 2008, las medidas tomadas en Europa para paliar la crisis y fue una de las líderes europeas en medio de la pandemia. El papel que juega su ropa, su estilo y la manera en que toma decisiones tanto en su país como en la Unión Europea, son temas muy interesantes que son retratados en el libro.

Por su parte, cuando aborda los políticos españoles, creo que es importante entenderlos como un todo, pues aunque cada capítulo se centra en un personaje en especial, todos, en conjunto, resumen el comportamiento de la política española en la década del 2010: Iglesias y Colau, liderazgos nacidos de los movimientos Indignados; Puigdemont que tomó gran relevancia con el proceso independentista de Cataluña, Sánchez que tomó relevancia a partir del 2016 con su oposición a Rajoy, y por último Abascal que ha tomado fuerza por el partido Vox. El leer los capítulos por separados, para luego entender el papel que cada personaje ha desempeñado en el panorama general, ayuda a entender mejor la elección de esas emociones que los representan, cómo su vida pública se puede definir a través de ellas y la manera en que utilizan sus conocimientos o los de sus equipos de trabajo, para que su comunicación y sus acciones se desarrollen en esos marcos.

En resumen, “La política de las emociones” demuestra que así lo quieran las personas o no, en la última década se han venido consolidando una serie de líderes que han tomado las emociones como su principal medio para diferenciarse de los demás. También se han modificado las campañas políticas y ahora los candidatos al igual que sus asesores, buscan más despertar sentimientos en el electorado que simplemente parecer los mejores; en la actualidad las campañas que no mueven sentimientos, no son tenidas en cuenta, pues como lo dice el mismo libro: Podrás olvidar lo que alguien te ha dicho, pero no podrás olvidar cómo te hizo sentir.

Un libro recomendado para las personas interesadas en comunicación y marketing político, para quienes deseen conocer más a fondo sobre el mundo de la política o para quienes tengan curiosidad por el mundo de las emociones y los sentimientos aplicados a las campañas políticas.

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