¿Quién domina el mundo? – Noam Chomsky

 

 

“No es posible entender de forma realista a quién gobierna el mundo sin hacer caso de los “amos de la humanidad”, como los llamó Adam Smith: en su tiempo, los comerciantes, los conglomerados multinacionales, enormes instituciones financieras, emporios comerciales y similares.” P.297.

El libro ¿Quién domina el mundo? De Noam Chomsky recoge una serie de escritos realizados por el lingüista estadounidense a principios de la década de 2010 hasta el 2015. En los 23 capítulos que componen el libro se habla de algunos temas recurrentes como: El papel de Estados Unidos en el escenario de poder internacional; análisis de la situación árabe-israelí y el papel que ha desempeñado Estados Unidos en los diferentes intentos de negociaciones de paz; una gran preocupación por dos grandes problemas del mundo actual: el calentamiento global y la inminente amenaza de destrucción nuclear que enfrenta el mundo con el aumento en la producción de armas nucleares en diferentes países.

El capítulo con el que comienza el libro lleva por título “la responsabilidad de los intelectuales, el retorno”; desde este capítulo Chomsky empieza a dejar patente su posición frente a Estados Unidos y su política exterior en diferentes regiones del mundo, hablando de las maneras en que son vistos los intelectuales de cada país de acuerdo a su aporte a la geopolítica estadounidense: Aquellos que hacen parte de los gobiernos que apoya Estados Unidos y ayudan a mantener un status quo favorable a los intereses norteamericanos, son considerados líderes y héroes que luchan por defender los derechos humanos y la democracia. Aquellos que cuestionan el status quo y plantean una resistencia a los intereses norteamericanos, abogando por una independencia intelectual de los lineamientos dominantes, son considerados rápidamente como peligrosos y rebeldes que hacen daño a la democracia global.

Siguiendo esta tónica, Chomsky plantea diferentes acciones realizadas por el gobierno estadounidense a lo largo de los años y en marco de la Guerra Fría, en la que se justificaban numerosos homicidios, golpes de Estado y dictaduras; con el fin de evitar que el mal contagioso del nacionalismo radical o las ideas comunistas empezaran a tener eco en diferentes regiones del mundo que tienen importancia estratégica para los intereses del país norteamericano. Es así como presenta algunos capítulos que hablan sobre La Crisis de los Mísiles de Cuba en 1962 y el manejo que le dio el presidente John F. Kennedy a esta situación que puso en riesgo la integridad del mundo. Igualmente habla de otros conflictos desarrollados en este marco como la Guerra de Vietnam y los golpes de Estado promovidos en diferentes países de Latinoamérica.

De igual manera, Chomsky dedica algunos capítulos a lo que considera como los principales problemas actuales, que como se había dicho antes, son el calentamiento global y la proliferación de armas nucleares. Sobre el calentamiento global, se centra en la posición negacionista que asumían y declaraban los candidatos republicanos a la presidencia de Estados Unidos desde el año 2015, y que finalmente se materializó con la salida de este país del acuerdo de París en manos de Donald Trump a mediados del año 2017. En este sentido, Chomsky caracteriza a los republicanos como un partido político que poco a poco ha ido perdiendo sus ideales y se ha entregado progresivamente a defender los intereses de grandes empresarios y sectores económicos que ven en el calentamiento global un obstáculo para desarrollar sus proyectos más ambiciosos.

Sobre la proliferación de armas nucleares, habla de la obsesión que ha presentado Estados Unidos frente a los planes de Irán por enriquecer uranio e inclusive desarrollar armas nucleares, acciones que le han valido sanciones internacionales y una serie de operaciones en países vecinos que buscan generar una disuasión frente a su posible deseo de realizarlo. Empero, Chomsky se centra en las necesidades que tiene Irán como país de defender su territorio y contar con armas que le aseguren una medida disuasoria frente a un posible ataque de sus vecinos Israel y Pakistán, quienes están apoyados por Estados Unidos y cuentan con armas nucleares.

Asimismo, Chomsky habla de las diferentes oportunidades, a lo largo de la historia, en las que el destino del mundo estuvo pendiente de un hilo por culpa de acciones militares estadounidenses que desafiaban la capacidad de reacción de los radares y sistemas de seguridad de la Unión Soviética, en los que, por razones inexplicables, los encargados de ordenar el ataque no accionaron el botón que iniciaba el lanzamiento de un ataque nuclear.

En general el libro presenta, desde una mirada crítica y parado en una posición de izquierda, la visión que tiene Chomsky de Estados Unidos y el papel que ha jugado en el mundo en los últimos 70 años. Haciendo uso de abundante bibliografía rica en cifras y datos, Chomsky plantea la manera en que el país norteamericano ha venido utilizando un doble rasero para omitir o restar atención a las acciones directas o indirectas que lo benefician, mientras utiliza todo el poder de sus medios de comunicación y sus instituciones para denunciar a viva voz aquellas acciones realizadas por actores o Estados que van en contra de sus intereses en el mundo.

 

Consideraciones del polvo – Jonatan Echeverri

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Imagen tomada de internet.

“Callar es sencillo. De tanto pensar la mente olvida que el pensamiento sirve para algo. Aquí en esta casa nadie piensa. Se puede vivir sin actuar, vivir sólo para ver cómo el cuerpo sufre, se complace o simplemente reposa. Uno se sienta en el mueble y puede estimar el peso de la carne, a la vez que la suavidad de los cojines.” P.25

El libro Consideraciones del polvo, de Jonatan Echeverri es una compilación de relatos cortos sobre diferentes personajes relacionados con el polvo: El polvo de la vejez, en el cual transcurren los últimos días de personajes que se encuentran en hogares de retiro, esperando su muerte, mientras disfrutan la rutina, el estar sentados o el espantar palomas. El polvo de la calle y la suciedad, en el cual se desarrollan la vida de los mendigos, los ladrones y los habitantes de calle. O el polvo del olvido y el paso de los años, en el cual se relatan historias de ancianos abandonados, hijos que cargan con el cuidado de sus ancianas y moribundas madres, o borrachos que cargan con el polvo de su conciencia turbia y sus acciones llenas de melancolía.

Los 18 relatos que hacen parte de este libro son un reflejo del día a día de las calles, los hogares de ancianos y las casas de familia. Cualquier historia descrita en el libro puede ser la historia de la persona que te encuentras en la calle y estira su brazo para pedirte dinero; del anciano que ves sentado en una silla de ruedas cuando visitas un hogar de retiro o de las señoras del club de crochet, que se reúnen una o dos veces a la semana para tejer y contarse los chismes de sus familias.

Todos estos relatos están escritos con un estilo particular, una narración personal, que refleja la tolerancia que han desarrollado los personajes con su vida o su condición. Vivir en la calle y sostenerse de limosna, se convierte en un estilo de vida aceptable y llevadero. Permanecer en una casa de retiro y esperar sentado a que llegue la hora del postre o la galleta, se convierte en una rutina en la que lo que más se disfruta es el premio en forma de comida que recompensa las horas de tedio y ocio en un lugar lleno de inactividad y silencio.

En conclusión, después de leer “Consideraciones del polvo”, no se vuelve a ver la vida callejera con los mismos ojos. Cada persona que nos cruzamos en la calle, cada abuelo que pasa ayudado por un caminador o impulsado en una silla de ruedas, puede ser perfectamente el protagonista de alguno de los relatos contenidos en el libro. Lo que se aprende luego de leer el libro es que cada persona es el protagonista de su propia historia y cada uno decide la manera de lidiar con su dolor, sus angustias y sus penas; pues en el fondo, sin importar la vida que se haya llevado o las decisiones que se hayan tomado, todos lidiamos nuestra propia carrera con la muerte y tarde o temprano ella ganará.

Los placeres del condenado – Charles Bukowski

 

 

Normalmente en los encabezados de las reseñas pongo una frase del libro que me haya llamado la atención, pero esta vez quiero poner el video de un poema entero, pues me pareció uno de los mejores del libro.

 

El libro Los placeres del condenado es una recopilación de muchos de los poemas escritos por Charles Bukowski (algunos de ellos inéditos) contenidos en un libro de más de 600 páginas, en las que se puede leer y disfrutar de un Bukowski más dosificado, en poemas que van desde los cortos de una hoja, hasta algunos más largos que llegan a las 5 ó 6 hojas.

Tal como lo he dicho en las muchas otras reseñas que he hecho de libros de Bukowski, los temas del autor se centran en mujeres, bebida y un estilo de vida bohemio en el que es más importante asegurar dinero para el alcohol que para comer o tener lujos.

De los cerca de 300 poemas que se encuentran en este libro, se puede decir que hay para todos los gustos y colores: están los del estilo tradicional, en los que se habla de sexo, cerveza y caballos; algunos de la infancia, donde Bukowski relata la manera en que su padre solía golpearlos a él y a su madre, o los días de escuela en los que “patios de colegio por siempre” se convirtió en uno de mis favoritos al narrar la historia de los tradicionales abusadores y la vida escolar que va trascurriendo de la primaria hasta la universidad, donde se van conociendo diferentes tipos de abusadores, pero siempre tienen la misma función.

Igualmente hay una serie de poemas dedicados a Linda, la primera esposa de Bukowski que falleció y que él todavía recuerda con dolor. También hay unos cuantos poemas de los últimos días del escritor, donde se encontraba enfermo y escribía sobre las idas al hospital, la vida en su casa y los sentimientos de desapego que empiezan a aflorar cuando se está llegando a los últimos días de vida.

Sobre este libro no tengo mucho que decir, pues siento que es una experiencia individual que se da al leerlo. Es sí un Bukowski diferente al de la prosa y los libros más conocidos, pero también es una faceta que muchas de las personas que se acostumbran a leerlo no conocen. Por ello el valor y los temas o poemas favoritos los dejo en la mano del lector.